En el metro de Singapur me llamó la atención este cartel.

En él están animando a los ciudadanos y ciudadanas de Singapur a denunciar a sus vecinos o como lo dicen ellos “ayudar a la polícia”. En una ciudad llena de cámaras, y cuando digo llena quiere decir que en cada esquina te encuentras cuatro que van controlando mediante Inteligencia Artificial tu comportamiento, también piden que seas tu quien vigile al prójimo para luego denunciarlo. 

La verdad es que te sientes muy segura, es difícil que te roben, pero a la vez tengo que decir que me sentía intimidada y observada. Cualquier comportamiento fuera de la ley puede ser penado. En todo momento estás pendiente de no traspasar ninguna norma como por ejemplo comer chicle en la calle o comer, beber, tener comportamientos obscenos con tu pareja (besar) o bien subir con Dorians (fruta con aroma muy fuerte) en el metro. 

Aquí se abre un debate interesante, vigilancia vs seguridad.  

El libro de George Orwell, 1984, se queda corto.