¿Te has preguntado alguna vez cuál es tu propósito en este mundo? ¿Para qué trabajas? ¿Sigues una inercia o haces lo que realmente deseas? ¿Eres feliz?

Estoy segura que alguna vez te has hecho estas preguntas o algunas parecidas. Las librerías están llenas de libros de autoayuda y best sellers. Conceptos como “mindfulness”, “yoga”, “meditacón”, “terapia”… son cada vez más recurrentes en nuestro entorno. Ello demuestra que existe un público que busca encontrarse a sí mismo y su propio sentido. 

Do Beop o El camino de la verdad es un monje budista que encontré paseando por la montaña de Hallasan (Jeju). Mi curiosidad y ganas de huir de los turistas me llevaron a seguir un sendero que terminaba en 3 casas anexas a un monasterio budista. Sus puertas estaban abiertas y pude ver que dentro había una única habitación con el suelo de bambú. No parecía haber nadie pero tampoco estaban deshabitadas. 

Una vez contemplada la belleza del lugar me disponía a seguir la marcha cuando apareció un monje budista que me preguntó si quería un té. Y allí estaba, sentada en la puerta de una de esas tres casas tomando un té con Do Beop. 

Me explicó que vivía solo desde hacía 3 meses y que se quedaría en ese lugar 5 años para practicar meditación y estudiar en profundidad el Budismo. Quería encontrar mediante la meditación su misión en este mundo. Y entonces, me hizo la pregunta del millón: ¿Y tu, sabes cuál es tu misión?

Pues todavía no lo sé, le dije. Do Beop respondió que existen muchas maneras de descubrir nuestra misión. La meditación es una pero no la única. Además, me explicó que la meditación se puede hacer en cualquier lugar. Y que para él viajar, estar con gente y amigos también es meditar. ¡Así que me lo apunto!

Nuestra conversación siguió con un té y unos caquis secos que sacó de algún sitio y estaban alucinantes. Ya no los he vuelto a encontrar. Ese día fue como un sueño. Un monje que sale de la nada y me pregunta por mi propósito, unos caquis buenísimos que no los he vuelto a encontrar en ningún supermercado de los países que he visitado y un entorno espectacular. ¿Alucinaciones? ¡Jajaja!

¿Qué es la vida? Un frenesí.

¿Qué es la vida? Una ilusión,

una sombra, una ficción,

y el mayor bien es pequeño:

que toda la vida es sueño,

y los sueños, sueños son.

(Monólogo de Segismundo, Calderón de la Barca)